sábado, 12 de febrero de 2011

Amarte

Soy de esas personas que disfruta las cosas sencillas.
Caminar por la playa.
Mirar atardeceres.
Observar la luna.
Oler flores.
Ver a las personas a los ojos.
Llenarme de felicidad con las sonrisas de los bebés.
Mojarme en la lluvia.
Alimentar animales.
Leer un buen libro.
Regalar abrazos.
Pero si tuviera que elegir una sola cosa en el mundo, la última que haría por el resto de mi vida, sin dudas, sería amarte.



miércoles, 2 de febrero de 2011

¿Nos comportamos como damas o como mujeres desesperadas?

No sé qué hago yo escribiendo acerca de este tema, si había prometido no hacerlo. Pero me indigna tanto la manera cómo las mujeres no respetan hoy en día, que debo desahogarme de alguna forma.
Suena loco, y les doy permiso de cachetearme por lo que diré, pero hubiera preferido que las mujeres nunca tomaran el control como lo hacen ahorita.
Es simple, el hecho de poder dar ellas el primer paso, lo convirtieron en una manera de darnos mala fama.
¿Por qué?
Simple: no respetan.
Desde pequeña me enseñaron una cosa y creo que a muchas no, o simplemente decidieron ignorar eso. Mi mamá siempre me repitió: el hombre ajeno, es mujer para usted.
¿Cuesta tanto entenderlo?
He visto cómo se han roto relaciones por culpa de mujeres que se meten. He visto cómo parejas que se aman discuten por culpa de una chica que, ajuro, quiere quedarse con el hombre.
¿Qué parte del “está comprometido” no entiendes?
Señoritas, dense su puesto y respeten, porque apuesto que no les gustaría que viniera otra y les hiciera lo mismo. Entonces ahí sí te dolería y verías lo mal que estuvo el haber actuado de esa manera.
No voy a defender a los hombres, muchos son los que andan brincando detrás de otra falda, pero esta vez quiero referirme específicamente a ellas.
Y más que todo lo hago porque vi que en Facebook hay mujeres que tienen un juego de decir “si tu novia te da tanta nota, ¿por qué dañarla con las zorras”. Y es increíble que hables con chicas hoy en día y la mayoría te cuente que conoce a alguna que está detrás de su novio.
¿Y entonces?
¿Será que hay pocos hombres o que el mundo está lleno de envidiosas, por no llamarlas zorras?
De igual manera, ven que el hombre en cuestión tiene pareja, le da su puesto, pero viven siendo regaladas, esperando que le lance un huesito, tal vez.
¿Por qué vas a decirle novio a alguien que no lo es y que sabes perfectamente que tiene una relación con otra?
¿Por qué vas a ser extremadamente cariñosa con un chico que sabes que tiene a alguien a quien respetar?
No sé si estaré yo equivocada de mundo y esa es la nueva norma. Si es así, entonces me quedé siglos atrás. Porque hombre comprometido es hombre sagrado.
Y no, eso de que si se tumba un gobierno se tumba una novia, no aplica. Por la simple razón de que luego te lo harán a ti también y, apuesto, no te gustará.
Entonces, mujeres de la vida, ¿de qué se trata todo esto?
¿Nos comportamos como damas o como mujeres desesperadas?
Porque creo que la última no es muy atractiva que digamos.
Entonces seamos serias.
Aprendamos que viviendo detrás de un hombre ajeno sólo nos dará mala fama. Y sí, ya saben que a muchos les encanta generalizar.
Pero, ¿me hacen un favor? Exclúyanme de la lista. Yo sí tengo valores. Yo sí sé lo que significa la palabra respeto y yo sí sé darme mi puesto.
Fuck off!




Quiero aprender



Recuerdo claramente estas palabras: “la universidad no es el único lugar donde aprenderás”.
Y es totalmente cierto. Pero, ¿qué pasa cuando es en tu casa de estudios donde sientes que no estás aprendiendo nada?
He tenido profesores excelentes, a los cuales les debo muchos de mis conocimientos, pero también he pasado por aulas donde salgo en las mismas… o conociendo un poco más acerca de la vida personal del profesor.
Me gustaría saber, ¿qué clase de periodistas se están formando hoy en día?
No soy la mejor, tengo muchas fallas y hay muchas cosas que aún debo aprender para poder considerarme una buena periodista, pero, señores, ¿cómo es posible que ya en noveno semestre de periodismo existan personas que no saben dónde colocar un punto o una coma?
Hay cosas que no me han dado en clases, las he aprendido en libros, en internet, en prácticas, en la calle, en el trabajo. Y eso es totalmente válido, pero no termino de entender cómo es que un profesor te va a decir que hagas determinada tarea, sin antes explicarte de qué se trata.
Por ejemplo, hubo semestres donde nos explicaban cómo estructurar una noticia, luego te mandaban a la calle a buscarla y escribirla. Excelente.
Y otros donde te decían cómo ellos hacían los reportajes en sus tiempos de reporteros, te mandaban a la calle a hacer uno y te lanzabas al abismo, a pegarla.
¿Aprendí de eso? No. Tocó leer, investigar, sacar bajas notas para poder entender de qué iba el asunto.
Y repito, no soy la mejor en el periodismo, pero me he sentido capaz de corregir a varios profesores. ¿Sabe qué? No tengo 10 puntos, tengo 18 porque esto, esto, y esto están bien. Entonces reaccionaban, recibía una disculpa y la nota que merecía.
¿Qué clase de educación tenemos hoy en día?
Señores, no le hagamos esto a los futuros profesionales. No nos hagamos esto a nosotros mismos.
Primero porque como estudiantes no hemos sido capaces de reclamar nuestros derechos a recibir una mejor educación en una universidad donde, de paso, estamos pagando mucho dinero.
Y segundo, porque no se trata de que nos hables de tu vida y nos des dos hojas de teoría, se trata de aprender con la práctica, con ejemplos, con ganas de transmitir tus conocimientos, que al fin y al cabo, para eso es que se obtienen, para luego pasárselos a otros, sino no tendría sentido.
Así como he admirado a muchos, también he sentido que salgo igual de un semestre, sin nada bueno. Me he reído en clases, hemos tenido noches divertidas compartiendo y relajándonos en el salón, y, por supuesto, noches donde sientes que no sirves para nada y estás en el lugar equivocado.
Por eso siempre he dicho, el que piense que el periodismo es la carrera más fácil, está equivocado. No están formando a personas que escribirán cualquier sandez mañana, están educando a individuos que, de alguna manera, enseñarán y le darán una visión del mundo a la sociedad el día de mañana.
Creo que como futura profesional, merezco una mejor educación, un mejor trato y no ir a un salón a oír lo que el profesor asignó, para luego en casa adivinar cómo debo hacerlo. Quiero aprender, señores, todos lo queremos.
Así como ustedes aprenden de nosotros, nosotros estamos pagando para aprender de ustedes.
That’s all.