Mentí.
Hace mucho, mucho tiempo no lo hacía.
Esta vez fue necesario.
Quería salvar mi corazón.
Pero sólo lo hundí más… lo ahogué.
Hice creer que jugué cuando sólo vivía sintiendo.
Situaciones que separan corazones me hacen mentir.
Ausencias, falsas esperanzas, falta de seguridad.
El caso es que mentí… ahora me odian.
¿Tener odio es mejor que tener lástima?
No, nada es peor que tener ausencia.
Mentí. Eso es todo.
Y tal vez él nunca quiera saber que fue así, o ignore saberlo.
Excelente entrada, muy reflexiva. Como siempre un placer pasar por aquí.
ResponderEliminarThor Manu
Muchísimas gracias =) Un abrazo.
ResponderEliminarMuy profundo, a veces me pasan cosas asi... hermoso blog
ResponderEliminarTe dejo el mio http://brujasdecocina.blogspot.com.ar/
Rocío de bendiciones
Muchas gracias =) Voy a leerte. Bendiciones de luz.
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